sábado, 26 de septiembre de 2009

Epilogo

A veces lo sueños… solo quedan en eso, en sueños. Deseos subconscientes imposibles de realizar. Otras veces, deseamos con tantas fuerzas ese sueño, que vivimos en una fantasía infinita, creando situaciones que no existen, momentos que jamás pasaran, una felicidad que tarda en llegar, que no llega, que quizás no llegara.
Pero tu estas ahí a la espera de un milagro, de que ese sueño al final se realice, para poder ser feliz.

Llévenselo oficiales
Dannie perdóname
Lo mataste papá… lo mataste
¡Tienen que salir de aquí!
Mi padre se esta muriendo…

¿Dónde estoy?
La textura donde me encontraba echado era muy suave, quizás eran plumas, o un cojín gigante, sentía como si estuviera flotando. Mis piernas se rozaron entre si, y pude sentir pequeños copos de algodón bordeando mi cuerpo, palpé una tela grande que cubría todo mi cuerpo y tenia impregnado su olor.

¿Estas aquí mi amor?

Su olor estaba todas partes, era una dulce mezcla entre manzanilla y almendras que me embriagaba y hacia flotar cada vez mas alto. Acerque mi mano para poder tocarlo, pero no lo encontraba. Me removí de donde estaba echado y comencé a buscarte con los ojos cerrados, pero ya te habías ido, dejando tu aroma impregnado en todas partes.

¿Este era otro de mis sueños?

Lentamente abrí los ojos, una inmensa luz alrededor no me dejaba ver bien, solo distinguía una silueta acercándose cada vez mas a mi.

- Tranquilo, todo esta bien…

La voz más dulce que había escuchado en mi vida, apareció junto a la figura borrosa que cada vez era más nítida. El dulce olor a miel la acompañaba, la luz iluminaba sus brillantes rizos canos, su vestido rosado y el collar de perlas que le compre con el sueldo de mi primer trabajo.

- ¿Elena?
- ¡Mi Gee!

Y vi su rostro sonriente, sus ojos brillosos como el sol. Ella era un ángel, mi abuela era un ángel.

- ¿Dónde estoy?
- Algunos le llaman cielo, otros le llamamos hogar


¡Hagan algo por favor!
¡Lo intentamos señora, por favor salga de la habitación!
¡Abuelo por favor, no nos dejes, por favor regresa!
¡La bala perforo la arteria coronaria!
Arritmia, despejen…1, 2, 3
¡No te vallas por favor papá!


- ¿Qué son esos gritos?
- Pronto dejaras de escucharlos, ven mi amor, dame la mano

Ya no estaba flotando, eso significaba que ¿ya no estaba soñando? Me levante de ahí para tomar su mano, era suave, calida y desprendía aun mas el olor a miel, camine a su lado de la mano y pronto la luz dejo de cegarme y una paz inundo cada parte de mi cuerpo.
Pronto la luz desapareció y pude que estaba en mi vieja habitación en Belleville.
¿Esto había dejado de ser un sueño?

- Estas igualito desde el último día que nos vimos.
- ¿Esto es un…?
- No mi amor, no es un sueño… - acerco lentamente sus manos a las mías – esto es real.

Abracé fuertemente a mi abuela, aun no podía creer que volvía a verla después de casi 50 años, era ella. Era mi Elena.

- ¿entonces…yo? – le susurré en el oído, no podía contener mas las lagrimas
- No te asustes mi vida, todo esta bien… te eh extrañado muchísimo, todos lo hemos hecho
- Yo también te eh extrañado abuela – dije abrazándola aun mas fuerte
- Lo sé mi amor – dijo sosteniendo mi rostro entre sus manos y besando mi frente - ahora escúchame cielo tengo algo importante que decirte.

Y como si lo hubiera invocado, su olor volvió nuevamente ha mi y comenzó a inundar la habitación, el sentirlo tan cerca de mi, me hizo erizar la piel.

- Frank – dije
- Si, es increíble como están conectados – dijo sonriéndome
- Puedo sentir su olor en toda la habitación
- A estado a tu lado desde que vino aquí
- ¿Dónde esta ahora? Necesito verlo…
- Lo sé… pero antes quiero decirte algo, el esta muy nervioso, tiene miedo de que estés molesto con él
- Luego de lo que hizo con mi hija…
- Escúchame cariño, Frank no sabia que la mujer con quien salía era Bandit y el tiene miedo de que no puedas creerle, por eso eh venido a hablar contigo antes y decirte que Frank no tuvo la culpa de que ella le halla mentido
- ¿Pero entonces por que no me lo dijo? ¿Por qué me lo oculto?
- Tenía miedo de tu reacción, no quería volver a perderte justo cuando acababa de recuperarte. Entiéndelo Gerard, Bandit no dejaba de acosarlo, Lindsay lo amenazaba, y Jakob quería matarlo
- Jakob…

Ahí recordé todo, yo estaba tirado en la fría loza donde estaba el cuerpo de Frank, tenia sangre por todos lados. Vi mi ropa y estaba impecable, no habían rastros de sangre, ni sentía dolor.

- El era un buen chico, pero se dejo influenciar por Lindsay y los celos lo cegaron, ahora esta pagando por lo que les hizo
- ¿Y mi hija? ¿Mi nieta?
- Ellas estarán bien, podrás verlas y cuidarlas desde aquí

Y el perfume de su piel regreso a la habitación y la inundo completamente, me sentía mareado. ¿Dónde estas mi amor?

- Anda ve, te están esperando cariño… - dijo mi abuela sonriéndome

Voltee hacia la puerta que estaba llena de una luz que me atraía, parpadee un par de veces y me encontré sobre un gran escenario.

- ¡Gerard!

Mi hermano menor vino corriendo hacia mí con los brazos abiertos, no podía creer que estaba abrazando a mi pequeño Mikey, esto era mejor que un sueño, por que esto era real.

- Ven, mamá esta como loca por verte
- ¿Mamá?
- ¡Mi Gee! – dijo mi madre tendiéndome los brazos – No puedo creer que al fin estés aquí, no sabes como eh soñado con este momento
- Oh mamá, mamita linda, te amo mami – dije sollozando en su hombro y acurrucado en ella mire a mi hermano – te amo Mikey

Mi abuela tenia del brazo a mi hermano y sonreía al verme en brazos con mi madre.

- Gracias abuela, te amo, gracias por traerme aquí – ella solo me sonreía

Mi madre sostuvo mi rostro entre sus manos y me beso la frente, acaricio mis mejillas y volvió a besarme.

- Anda mi amor, te están esperando - dijo

Camine despacio hacia el escenario, intentando seguir de donde venia el perfume de su piel y me encontré con una multitud de fans que al verme corearon mi nombre.

- Tardaste mucho – grito una voz a mi espalda
- ¿Ray? ¿Pero…?
- El avión que nos llevaba de regreso a casa se cayó - dijo Bob
- ¿Te acuerdas que me había quedado sin cabello? ¡Mira ahora tengo un montón! – dijo Ray – además aquí esta Krista – dijo enviándole un beso volado a su esposa en la primera fila del publico
- Y yo tengo a Dixie – dijo cargando a su perrita quien lo lamia y no dejaba de moverle la cola – por cierto… alguien te esta esperando



Y fue entonces cuando lo vi.
Su cabello largo castaño, sus ojos color avellana brillando, la sonrisa iluminada en su rostro. Frank era un ángel, el ángel más perfecto del cielo. Si no lo hubiera conocido antes de llegar aquí, hubiera pensado que la perfección la había obtenido aquí.

- Frankie…

Ambos corrimos a nuestro encuentro y nos enlazamos en un abrazo eterno, donde nos besamos apasionadamente dando vueltas por escenario.
Lo abrase fuerte para poder sentir su cuerpo junto al mío, para poder cerciorarme que realmente era él, que mi Frank, que la persona que amo desde hace casi 50 años estaba aquí, para mi y esta vez para siempre.

- Te amo, eres el amor de mi vida…
- Jamás pensé que este momento llegaría
- Pero llego, y nunca mas mi amor, nunca mas nos separaremos

Las fans aplaudían y gritaban como locas, quizás veían cumplir otro de sus sueños también. Frankie tenía enrollada sus piernas en mi cuerpo y girábamos besándonos, hasta que el escenario desapareció y aparecimos en mi habitación.
Y nos fundimos en un eterno beso, donde nuestros cuerpos se juntaron y fueron uno solo…

- Eh esperado tanto por tenerte así – me dijo
- ¿Te haz dado cuenta que hace mucho no lo hacíamos en una cama de verdad? – le susurré en el oído mientras entraba en él
- Gerard, hace mas de 40 años no lo hacemos ni el catre de un trailer – dijo con la respiración entre cortada

Y es que quizás el mundo no estaba preparado para nuestro amor.

- Te amo Frankie
- Y yo a ti Inspector Lupo – me dijo sellando mis labios con un beso

Nunca un atardecer temprano sobre Belleville, fue tan perfecto hasta hoy.


FIN